Cuando decidimos ponernos nuevamente
a realizar una dieta, con el objetivo de quitarnos esos kilillos con los que
llevamos luchando casi media vida, en la mayoría de las veces no tenemos en
cuenta, de que no se trata de buscar una dieta e intentar seguir sus
indicaciones, sino que hay que hacer un análisis más detallado de otras razones
que están haciendo que añada un nuevo intento a todos los esfuerzos realizados
hasta el momentos.
Uno de los grandes errores es volver
a intentarlo de la misma o parecida forma, con la que miles de veces lo hemos
intentado, y hemos fracasado.
Siéntate un momento, piensa si
realmente quieres bajar de peso, ¿quieres
dejar atrás la lucha continua con la comida y quieres comenzar a tener una
relación sana?. Esta opción está en tus manos, pero también
está la de seguir tal cual, pero aceptándote y no luchando continuamente contra
lo que somos y nos gustaría ser, por ello debes decirte y elegir entre: ¿Quiero
seguir como estoy, quererme, aceptarme, ser feliz y no luchar para ser de otra
forma?. O ¿quiero cuidarme, aprender a comer de forma sana, y quitarme esos
kilillos con los que no me siento a gusto?.
Si has tomado la decisión y quieres
comenzar, escribe una carta de despedida a ese “yo” tuyo del que te quieres
deshacer, hazla con cariño, lleva muchos años contigo, pero déjale claro que no
quieres continuar el camino a su lado.
Una vez despedido, ponte manos a la
obra y comienza YA, no esperes al
lunes, ni a primero de mes, ni de año, ni después del verano, comienza ahora,
nunca habrá mejor momento que este instante.
Algunas pautas que te pueden ayudar:
1ª Auto-observación
- Realiza una observación escrita y
precisa de tu alimentación. Una fiel descripción te permitirá evaluar tus
hábitos alimenticios y modificar seguidamente tu comportamiento.
2ª Establecer un plan alimentario
- Realiza un plan alimentarío fácil
de llevar.
- Inicia una actividad física
adecuada a tu forma de vida.
3ª Aprender a tomar las medidas apropiadas
- Descubre las circunstancias en las
que se originan las crisis alimenticias.
-
Inventa las estrategias que te permitirán prevenirlas.
4ª Cambiar la manera de pensar
- Toma conciencia de la reacción
automática e inconsciente de tus pensamientos.
- Reemplázalos por pensamientos más
racionales y funcionales.
5ª Conclusión
- Mantén lo adquirido, con un
seguimiento de lo aprendido, hasta que los nuevos hábitos más saludables
reemplacen por completo a los anteriores.
- Establece medidas de prevención.
El éxito dependerá
esencialmente de tu determinación y compromiso con la consecución de tus
objetivos.