Un
equipo de científicos de la Universidad de Cambridge publica un estudio que
revela cómo nuestro propio cerebro activa sus mecanismos de defensa ante la
falta de comida y, literalmente, nos boicotea el plan de régimen.
"Las
estrategias para perder peso pueden ser ineficientes porque el cuerpo funciona
como un termostato y asocia la cantidad de calorías que quemamos a la cantidad
que hemos comido", explica Clémence Blouet, uno de los autores del
trabajo. "Cuando comemos menos, nuestro cuerpo lo compensa y quema menos
calorías, dificultando la pérdida de peso. Sabíamos que el organismo es capaz
de regular este termostato calórico, pero el cómo lo consigue era un
misterio".
Los
investigadores se centraron en una estructura localizada en el hipotálamo y que
ayuda a regular la cantidad de comida ingerida. Se trata de un grupo de
neuronas denominadas AGRP que al activarse provocan el aumento de apetito, y al
inhibirse lo disminuyen.
Valiéndose
de un truco genético para 'apagar' o 'encender' estas neuronas, los autores del
trabajo estudiaron el comportamiento de ratones situados en unas cámaras
especiales en las que se podía medir el gasto energético en términos de
temperatura, y donde se variaba la cantidad de comida disponible.
Los
resultados revelaron que las neuronas AGRP no solo regulan el apetito, sino que
también son capaces en influir en el gasto energético en función de la cantidad
de comida disponible. Cuando se activaban, los ratones comían más, pero cuando
no había comida disponible, la consecuencia era una disminución en el gasto
energético, limitando el número de calorías que se queman y por tanto la
pérdida de peso. Tan pronto como volvía a haber comida disponible, este efecto
se interrumpía y el gasto energético volvía a valores normales.
Este
mecanismo ha perdurado a lo largo de la evolución para defendernos en épocas de
hambruna, pero hoy puede chafarnos la dieta.
Se
trata pues de un mecanismo que ha perdurado a lo largo de la evolución para
defendernos en épocas de hambruna, pero que hoy supone un fastidio para las
personas que desean perder peso. En ellas, la dieta es poco efectiva, pues el
organismo compensa la reducción de calorías.
Fuente:
http://www.muyinteresante.es/salud/articulo/por-que-las-neuronas-nos-boicotean-cuando-hacemos-dieta-581495799536